el proyecto

Las mujeres argentinas constituyen el 51% de la población del país, pero la pobreza, la discriminación y la violencia las afectan de manera desproporcionada. Sus movilizaciones en reclamo de sus derechos, que tienen una historia larga y diversa, dieron un giro en 2015 frente a un incremento preocupante de la violencia de género. Desde entonces, las mujeres han manifestado sus demandas en el espacio público y en redes sociales, entre otros espacios, con una insistencia y una visibilidad crecientes. A partir de marzo de 2020, la pandemia de COVID-19 ha exacerbado la desigualdad de género y obstaculiza la realización de manifestaciones públicas.

Este proyecto se propone investigar las prácticas comunicacionales cotidianas de las mujeres argentinas movilizadas en pos de justicia de género en tiempos de ciudadanía digital. ¿En qué consisten esas prácticas comunicacionales cotidianas? ¿Cómo se despliegan en la vida diaria, durante los tiempos en que no se están llevando a cabo movilizaciones colectivas? ¿De qué maneras contribuyen a la resolución democrática de los reclamos que expresan? ¿Qué obstáculos enfrentan?

El proyecto, financiado mediante una Acción Marie Sklodowska-Curie para el período 2020-2023, se enfoca en el caso argentino desde una perspectiva cualitativa. Su propósito es aportar a la comprensión de las microtecnopolíticas de la participación ciudadana que apuntan a solucionar la desigualdad de género entre otros elementos disfuncionales o rotos de la democracia.

Objetivos:

comprender las prácticas comunicacionales cotidianas de las mujeres argentinas movilizadas en pos de justicia social en el contexto de las tendencias macro que afectan al país.

puntualizar la importancia práctica y político-cultural de los diversos ensambles comunicacionales utilizados individual e interpersonalmente por estas mujeres en la vida diaria.

informar la capacidad tecnopolítica de estas mujeres para generar escucha, en tanto resolución efectiva de sus demandas, por parte de los poderes públicos y organismos de gobierno, las corporaciones digitales y noticiosas, y otros actores sociales relevantes.